“El Estado debe dar a los niños la posibilidad de tomar la decisión de ser deportistas de alto rendimiento”, Constanza Castellanos, directora Académica del Comité Olímpico Colombiano
La directora Académica del Comité Olímpico Colombiano, Constanza Castellanos, también hizo parte de la comitiva que visitó la Uniautónoma. Resaltó que desde su dependencia se trabaja para desarrollar competencias formativas y administrativas para dirigentes, atletas y entrenadores enfocados en optimizar el rendimiento deportivo en Colombia, a través de alianzas estratégicas con universidades y otras instituciones educativas, y de los recursos del Comité Olímpico Internacional.
Explicó que dentro del Comité hay dos grandes áreas: la de dirección Deportiva, la que todo el mundo identifica porque es donde se hace la preparación a competencias y el proceso de participación en eventos del ciclo olímpico; y la dirección Académica, que cumple un rol fundamental para los procesos del Movimiento Olímpico, buscando algo más que conseguir medallas: “esta dirección académica tiene tareas fundamentales que debe resolver por medio de diferentes estrategias. Vamos a contarles un poco de qué se trata esta tarea y qué estamos haciendo en el tema del desarrollo de los valores Olímpicos, sobre todo en la región”.
Doña Constanza enfatizó además en que la responsabilidad académica del deporte es fundamentalmente de las universidades, y que por eso el Comité Olímpico hace alianzas estratégicas con estas entidades: “estos convenios son punto de referencia para desarrollar habilidades en los futuros profesionales y desde el Comité podemos apoyarlas con herramientas formativas. Eso sí, una de las tareas fundamentales de este Movimiento Olímpico es capacitar a los dirigentes deportivos de Colombia, es lo que venimos a hacer al Cauca y lo que venimos haciendo en otras regiones. Y esa es nuestra mayor fortaleza”.
Respecto a lo anterior, manifiesta que la Carta Olímpica, de donde viene toda la filosofía del Movimiento, es la que realmente inspira al deporte mundial, porque trasciende hasta la formación integral de las personas y el desarrollo social de las comunidades: “¿Ganar medallas es importante? Por supuesto, pero los procesos deportivos son más importantes, porque detrás de cada medalla hay un trabajo de responsabilidad, de amistad y respeto; al final no todos serán una Caterine Ibargüen porque arriba llegan muy pocos, pero a la sociedad le queda todo ese proceso de formación y el deportista que se formó”.
Su posición frente a la relación entre el deporte y la política es conciliador, aclarando que no están apartados y que, como el deporte es un medio potente dentro de la sociedad, este también se ve necesariamente inmerso en procesos políticos. Y ejemplifica: “el deporte hace parte de los procesos de desarrollo para la Paz, aunque practicar deporte no haga que la comunidad viva en paz. Entonces somos un medio que brinda herramientas a las comunidades, porque el deporte sirve como modelo para la sociedad, en el se desarrollan responsabilidades y honestidad, y eso es lo que realmente queremos que entiendan en las regiones”.
Para finalizar afirma que los niños deben tener muchos buenos ejemplos, porque el deportista se forja a través del ejemplo y del entorno: “el Estado, la sociedad privada y civil, deben darle a los niños la posibilidad de tomar la decisión de ser deportistas de alto rendimiento, obviamente si se lo permiten su talento y condiciones, pero es más importante que esos niños y jóvenes realmente entiendan que el deporte es mucho más que ganar… obviamente los deportistas de alto rendimiento tienen siempre la convicción de que serán atletas olímpicos, pero ellos no sólo deben construir el logro de una medalla sino ser un atleta y persona integral”.